Bélgica, el país de la cerveza

El origen de la cerveza belga se remonta a la época de las cruzadas en el siglo XII, antes de que Bélgica fuera un país independiente, así que no es de extrañar que las cervezas belgas sean conocidas y galardonadas mundialmente.

Hoy en día existen más de mil marcas de cerveza belga que elaboran cervezas de cientos de estilos y sabores diferentes. Además, cuando hablamos de estilos de cerveceza no podemos pasar por alto la cerveza de abadía y la cerveza trapense, dos estilos de cerveza que a menudo se confunden. ¡Pero no te preocupes, te vamos a contar la diferencia! 

Las cervezas de abadía se elaboran en cervecerías comerciales y usan el nombre y la receta de abadías tanto abandonadas como en funcionamiento. Tripel Karmeliet y Grimbergen son ejemplos de cerveza de abadía.

Sin embargo, las cervezas trapistas son las que se elaboran en una abadía trapense y el cuyo proceso es ejecutado o supervisado por los monjes trapenses. Además, la cerveza trapista no es sólo un estilo de cerveza, también es una denominación de origen que avala que las cervezas con este sello han sido elaboradas bajo licencia de una abadía. En Bélgica hay seis abadías que cuentan con el sello "Producto Trapense Auténtico", entre ellas Chimay y Rochefort.

Otro estilo original de Bélgica es la cerveza lambic, conocida por su fuerte sabor ácido, que se elabora utilizando levaduras silvestres. Algunos ejemplos son la gran variedad de cervezas que elabora la cervecería Lindemans.

Pero la gran variedad de estilos propios de cerveza no es lo único que hace que la cerveza belga sea única. La gran mayoría de cervezas belgas tienen un vaso específico para disfrutar al máximo esa cerveza. Hay cientos de vasos y copas con diseños diferentes cuyo propósito es realzar el gusto y el aroma de la cerveza. 

En Beer Republic tenemos una gran diversidad de cervezas belgas, ahora también en formato 75cl, y una sección de vasos y copas para poder difrutar de tu cerveza favorita.